Restauración plantea denunciar a Cort por las pérdidas económicas a causa del cierre de playas

Desde la Asociación de Restauradores de Mallorca, su presidente, Alfonso Robledo, ha subrayado que “los restauradores están muy quemados por los continuos vertidos de aguas fecales en las playas de Ciudad Jardín y Can Pere Antoni que están provocando enormes pérdidas económicas a los bares y restaurantes cercanos a estas playas”.

Robledo añade que “hemos hablado de este problema en varias ocasiones ya que no es normal lo que está sucediendo. Por ello estamos estudiando denunciar al Ayuntamiento de Palma por esta situación por posible responsabilidad económica derivada de estos vertidos. Estamos cansados de que los vertidos se produzcan de manera periódica ya que esto está afectando al negocio de los restauradores ya que cuando se produce un vertido, como mínimo, se cierran las playas entre dos y tres días y esto significa perder mucho dinero, más en verano que es cuando se hacen las mejores cajas”.

Alfonso Robledo no entiende la inacción y dejadez del Cort y del Govern balear al considerar que “este problema podría solucionarse con la gran cantidad de dinero que obtienen del impuesto turístico sostenible. Todo lo demás son soluciones parciales ya que lo que hay que hacer es construir una depuradora que pueda depurar todas las aguas y evitar con ello nuevos vertidos que están afectando al sector comercial de Palma y al medio ambiente natural de nuestra capital”.

Robledo ha añadido que la denuncia la interpondría la Asociación de Restauración en nombre de los bares y restaurantes afectados.

INVESTIGACIÓN JUDICIAL

Como se recordará, este martes las playas de Ciudad Jardín y Can Pere Antoni, así como el resto de las playas de Palma volvieron a ser cerradas al baño público por la presencia de nuevos vertidos de aguas mixtas y residuales a causa de las tormentas. Los ciudadanos no han podido bañarse en estas playas hasta este jueves cuando se han realizado las analíticas pertinentes.

En estos momentos, la judicatura mantiene abierta una investigación que está bajo secreto de sumario para dirimir las presuntas responsabilidades que se puedan derivar de los vertidos de aguas fecales y residuales al mar y su consiguiente daño ecológico y medioambiental. Esta investigación, que se puso en marcha a raíz de la denuncia del abogado Santiago Fiol, ha supuesto de momento la imputación de la anterior presidenta de Emaya, Neus Truyol, y la gerente de esta misma empresa municipal.