El derribo de tres chabolas de Son Banya planificado para este miércoles ha sido escenario de una trifulca entre los vecinos y los operarios municipales que ha culminado con una carga policial y un detenido. Los operarios han advertido que algunos vecinos habían empezado a levantar una nueva vivienda en uno de los solares libres. Tas un receso de varias horas, se ha reiniciado la demolición.
El Ayuntamiento de Palma iniciaba este miércoles el derribo de otras tres viviendas de Son Banya, a fin de continuar con el proceso de desmantelamiento del poblado. A diferencia de la semana pasada, cuando los derribos se produjeron sin incidentes hasta el punto de que las viviendas ya habían sido abandonadas antes de la llegada de las máquinas, este miércoles, un grupo de personas ha recibido con piedras a los operarios y a los policías. Los agentes han tenido que cargar y han procedido a la detención de una persona, informan fuentes municipales.
El Consistorio palmesano prevé que cada miércoles se sigan ejecutándo órdenes de desalojo en el poblado.
De acuerdo con esta planificación, a las 9.30 horas llegaron al poblado miembros de los juzgados, el área de Infraestructuras, Policía Nacional y Policía Local y Bienestar y Derechos Sociales para entregar las órdenes de desahucio y proceder a los derribos. La previsión era que entre el miércoles y el viernes de esta semana se hubieran derribado tres viviendas ubicadas en la denominada calle Cuatro del poblado.
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