La lacra de Demon F.V. se extiende por Mallorca

De momento, las Policías locales de los municipios afectados no tienen ningún identificado por las pintadas -de hecho, se desconoce si es un individuo o más- pero sí muestran preocupación por el deslucimiento y degradación que suponen. Desde el Ayuntamiento de Calvia, por ejemplo, especifican que sólo es competencia municipal la limpieza de pintadas cuando éstan sean de odio (xenófobas, insultantes contra personas o entidades concretas ...). En Palma, la empresa pública limpia las fachadas que son de su propiedad -como contenedores y papeleras- y también las de odio, pero en una fachada privada, la responsabilidad es del mismo propietario.

Siempre es el mismo mensaje, siempre en mayúsculas y casi siempre, en morado.

Las primeras aparecieron en la carretera que conecta Banyalbufar y Estellencs, Estellencs y Esporles como en el mismo pueblo de Banyalbufar. Después llegaron a Calvià -zona de El Toro- y ahora, la firma se ve en la entrada del Arenal de Llucmajor y también en un muro de la carretera Ma-6020 -la que conecta el Arenal con la autopista, en dirección Santanyí- así como en una fachada de una edificación de la carreretera del aeropuerto.

LAS PINTADAS EN PALMA, UNA LACRA QUE PREOCUPA CADA VEZ MÁS

El caso de Demon F.V. es llamativo por la reiteración y la ubicación pero sus pintadas no son más que una gota en el mar de graffitis que inunda Palma, y cada vez más localidades de la isla.

En la capital, por ejemplo, el centro histórico está inundado de garabatos, letras, dibujos y símbolos. De todos los tamaños, formas y colores. En calles, pasajes, plazas.

Empresarios -sobre todo los pequeños- , vecinos y asociaciones, como la conservacionista ARCA, muestran su preocupación por la degradación de la ciudad a causa de los sprays. "Son un insulto a nuestro patrimonio, una ofensa a nuestra ciudad", lamenta Àngels Fermoselle, quien critica la "inacción" de Cort ante esta problemática. "Una pared llena de pintadas invita a hacer más. Es urgente arctuar con celeridad".

Algunos partidos políticos, como PP y Vox, han metido este asunto en sus agendas de campaña. El candidato del PP, Mateo Isern, ha prometido un plan contra "la plaga de pintadas" en Palma y el de Vox, Fulgencio Coll también observa con preocupación la caída libre estética de Ciutat.