El coche policial inteligente de Palma recupera 77 vehículos robados

El i-zeta, un Toyota Prius híbrido, cuenta con cámaras exteriores e interiores y tecnología punta que le permite leer todo vehículo a su paso, esté en marcha o estacionado. De este modo, es capaz de identificar automáticamente cualquier coche, camión o motocicleta que haya sido robado o que se esté siendo buscando por cualquier otro delito cometido en Baleares o en la Península.

"Robos, atracos, drogas... Cualquier señalamiento que esté en activo y que haya una matrícula que rastrear, nos salta el avio a su paso", comentan fuentes policiales a este digital. Rastrea, graba y en caso de no ser requeridas por un juez, las imágenes se borran por el propio sistema informático. "El objetivo es lograr la máxima eficiencia y mayor seguridad jurídica tanto para los ciudadanos como para los agentes en cualquier intervención. "Es habitual que los detenidos se autolesionen en la parte posterior del coche, pegándose contra las puertas o mampara. De este modo, quedará grabado y acreditado que las lesiones se las ha producido él o ella y no la Policía", comentan desde el Grupo Operativo de Respuesta.

Entre los logros de este súpercoche patrulla destaca la recuperación de un coche que había sido robado en Madrid y que apareció en Camp Redó tras una persecución protagonizada por una narcotraficante, o la intervención en casos de robos con violencia por parte de bandas del Rolex en la zona centro. Estos grupos, muy activos durante el pasado verano en el corazón de Palma, emplean motos para huir después de robar el reloj de alta gama. Ahora, con el i-zeta todo motorino sospechoso cae a la primera.

La radiopatrulla i-zeta cuenta también con teclado lo que permite consultar los datos de cualquier persona, como antecedentes o estado. "Nos ahorra muchos trámites. Hasta ahora había que hacer comprobaciones por radio o teléfono y de este modo actuamos de manera inmediata y autónoma", señalan miembros del GOR.