Presencia del Rey el 17-A en Barcelona y Cambrils
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha subrayado que el jefe del Estado acudirá el 17 de agosto a Barcelona a mostrar su cariño y su respeto a las víctimas de los atentados y sus familias, así que ha lanzado un aviso a quienes, desde el independentismo, rechazan su presencia: "Lo importante es no olvidar por qué nos congregamos todos en Barcelona y en Cambrils los días 17 y 18", ha dicho, pese a la insistencia de la Generalitat en no querer compartir actos con el jefe del Estado, y a pesar de la situación que se vivió el año pasado, cuando tanto el Rey como el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sufrieron abucheos.
En declaraciones a los periodistas, Sánchez ha anunciado que Felipe VI acudirá acompañado de la Reina Letizia y ha remarcado que "contra el terrorismo y por la solidaridad con las víctimas del terrorismo y sus familias no hay fisura posible, ahí vamos a estar todos, desde el primero al último de los españoles".
El jefe del Ejecutivo ha destacado que lo que se vivirá es una expresión de solidaridad y de respeto hacia personas que perdieron a seres queridos y hacia dos ciudades que "vieron atacada su convivencia por parte de personas que no creen en esa convivencia". Así, preguntado cómo piensa hacer el Gobierno para apoyar al Rey del acoso del independentismo, ha replicado que lo que está haciendo el Ejecutivo es "precisamente dar normalidad a hechos tan importantes" como la presencia de los Reyes los días 17 y 18 en la dos ciudades catalanes.
Por lo tanto, ha señalado que lo que harán los Reyes y también el Gobierno es representar a toda la sociedad española, con un mensaje que "convoca a la absoluta mayoría de la sociedad catalana y española".
Sistema de financiación entre CCAA
Sánchez también ha hablado sobre financiación autonómica antes de reunirse con la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, y ha asegurado que el Gobierno siente "empatía y comprende el hecho insular". "Vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para que más pronto que tarde se pueda aprobar ese Régimen Económico de Baleares, que es fundamental para los vecinos de estas islas", ha asegurado.
Sánchez ha señalado que la comprensión del Gobierno hacia el hecho insular se ha trasladado a los hechos, con medidas como la aprobación indefinida de la subvención del 75 % de los vuelos e Baleares a la Península y el aumento de frecuencias de la declaración de servicio público entre Mahón y Madrid.
Además, ha afirmado que "prefiero centrar el debate sobre las mejoras que podemos hacer a partir del sistema de financiación autonómica existente, pero, si las comunidades autónomas están dispuestas a llegar a un acuerdo, el Gobierno no será el que diga que no", ha asegurado Sánchez.
Así, ha recordado que, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, el Gobierno ha planteado la creación de un grupo de trabajo "para hablar, evaluar y ver la posibilidad de llegar a un acuerdo de renovación" del sistema, "antes de las lecciones de mayo de 2019", y ha añadido que, hasta que no haya nuevo sistema de financiación autonómica, el Gobierno "no se va a quedar parado". "Vamos a mejorar las condiciones de financiación de todas y cada una de las comunidades autónomas", ha asegurado.
Sánchez ha agregado que la senda de estabilidad que propuso el Gobierno en el Congreso de los Diputados que no salió adelante "mejoraba, y mucho, y daba oxígeno en más de 2.400 millones de euros a las comunidades para financiar la sanidad, la educación, los servicios sociales y la dependencia de cada uno de los territorios".
"Espero que, cuando volvamos con ese debate en septiembre, algunos de los grupos parlamentarios tengan en cuenta y antepongan el interés de los ciudadanos de sus territorios a los intereses partidarios", ha reclamado.
Turismo e inmigración
Sánchez ha subrayado además que los indicadores apuntan a que España está en una senda de "robustez económica", pero ha destacado la necesidad de no concentrar el crecimiento solo en el turismo, la hostelería o la construcción, sino de dar más peso a la industria y a la innovación. Sánchez se ha congratulado de que España vaya a acabar el año con un 2,7 por ciento de crecimiento, por encima de la media de la UE, y de las últimas cifras registradas sobre empleo, exportaciones y prima de riesgo.
"Podemos decir al conjunto de la ciudadanía que hay esperanza y optimismo razonable en cuanto a la robustez del crecimiento económico", ha destacado el presidente del Ejecutivo.
No obstante, ha puntualizado que España "no solo puede concentrar el crecimiento económico en el turismo, la hostelería y la construcción" y que el objetivo del Gobierno es plantear medidas en favor de "la reindustrialización y la apuesta decidida por la ciencia y la innovación". El líder socialista ha resumido en que con el nuevo Ejecutivo comienza "una etapa cargada de ilusión, de esperanza y de reivindicación de la ejemplaridad pública".
"Una nueva etapa cargada de proyectos que sacarán a España del impás, del letargo y de la inacción que ha sufrido en los últimos años. El nuevo Gobierno tiene una hoja de ruta clara, definida y delimitada", ha añadido. Según Sánchez, los tres ejes de esta hoja de ruta son "crecimiento, creación de empleo digno y cohesión social".
En cuanto a las últimas cifras de desempleo, Sánchez ha destacado el aumento del número de trabajadores y de afiliados a la Seguridad Social, si bien ha considerado conveniente "no caer en la autocomplacencia". En su charla con el Rey, Sánchez ha detallado otras medidas aprobadas en los últimos Consejos de Ministros en materia de sanidad, de apoyo a las víctimas de la violencia de género y de cohesión social.
También han hablado de inmigración y de los acuerdos adoptados para "coordinar todos los esfuerzos" en la lucha contra las mafias que trafican con personas. "La inmigración no llegó con este Gobierno. Es la política migratoria la que ha llegado con este Gobierno", ha declarado Sánchez para criticar la política aplicada por el Ejecutivo de Rajoy.
Máster de Pablo Casado
Sánchez, no ha querido este lunes analizar la polémica sobre el máster del presidente del PP, Pablo Casado, que investigará el Tribunal Supremo, pero ha defendido que los políticos inmersos en este tipo de situaciones deben dar explicaciones a los ciudadanos.
Así lo ha defendido tras conocer que la juez de Instrucción número 51 de Madrid ha elevado al Tribunal Supremo el caso en el que investiga las presuntas irregularidades en el máster que realizó en el curso 2008/2009 el presidente del PP en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid (URJC) al apreciar "indicios de criminalidad".
Sánchez ha defendido que, en su papel de presidente del Gobierno, no debe calificar ningún proceso judicial y sólo debe velar para que todos se lleven a cabo "con máximas garantías y la máxima normalidad posible". Eso sí, ha insistido en que "lo que deben hacer" los actores políticos implicados en este tipo de casos es dar explicaciones a los ciudadanos. "Ahí me quedo", ha dicho sin querer profundizar más en las implicaciones que pueda tener el caso.