Baba y Ruiz de Galarreta, bajas sensibles para el Mallorca en el choque frente al Mirandés

Con la autoestima muy dañada tras los pinchazos ante rivales situados en la parte baja de la clasificación, el Real Mallorca necesitan gana para mantener o ampliar la ventaja de seis puntos que le separa del Almería en la lucha por el ascenso directo.

El equipo de Luis García Plaza, quien cumplirá ante el Mirandés el primero de los dos partidos de sanción que le ha impuesto el Comité de Competición tras ser expulsado en el choque de la Nova Creu Alta, se exige una reacción ante el conjunto burgalés para no ver menguadas sus opciones en el tramo definitivo del campeonato. Ante la ausencia del técnico tiular, su ayudante, Pedro Rostoll, será quien se siente en el banquillo.

Los mallorquinistas han solventado con éxito los dos últimos partidos que se han dirimido en Son Moix, saldados con triunfos ante Leganés (1-0) y Lugo (2-0), una racha positiva que, sin embargo, contrasta con el saldo negativo en sus salidas más recientes, en las cuales ha sumado un solo punto (1-1 ante Las Palmas) de los 15 en juego.

García Plaza deberá efectuar cambios obligados en el once por las bajas de los centrocampistas Íñigo Ruiz de Galarreta y Idrissu Baba, ambos lesionados. Es probable que el serbio Alexandar Sedlar, que habitualmente se desenvuelve como defensa central, acompañe al veterano Salva Sevilla en el mediocampo, y también es posible el regreso a la titularidad del mallorquín Antonio Sánchez tras superar la Covid 19. Por su parte, el rival de este sábado, el Mirandés, arrastra la única baja de Iván Martín.

LUIS GARCÍA: "ES UN PARTIDO CRUCIAL"

En la rueda de prensa previa al encuentro, Luis García ha admitido que el partido ante el Mirandés es "crucial" para los intereses de su equipo en la lucha por el ascenso directo, sobre todo después de haber encajado dos derrotas consecutivas. El técnico madrileño ha destacado que el equipo "tiene muchas ganas de jugar para sumar tres puntos y volver a ser felices, después de dos traspiés que no me han gustado".

Para García Plaza, la clave de la mala dinámica del Real Mallorca en sus últimos compromisos a domicilio se ha debido a que "empezamos bien los dos partidos, pero nos marcaron en la primera ocasión y luego no supimos remontar. Este es el único debe del equipo en toda la temporada, y es una asignatura pendiente que tenemos", ya que, de hecho, el conjunto barralet no ha sido capaz de anotarse la victoria en ninguno de los choques en que ha ido por debajo en el marcador.

PEDRO ROSTOLL DIRIGIRÁ AL EQUIPO DESDE EL BANQUILLO

El preparador mallorquinista ha insistido en que el equipo "depende de sí mismo" para ascender en las seis jornadas que restan, y ha destacado que "aun perdiendo tres partidos seguidos" seguirán con opciones de ascenso directo. "Si yo gano, me da igual lo que hagan los demás", ha añadido el técnico en relación a los resultados que puedan cosechar los rivales directos, y muy especialmente el Almería, que ha presentado esta semana a su nuevo entrenador, Rubi, tras la destitución del portugués José Gomes.

Sobre el Mirandés, García Plaza ha indicado que se trata de un bloque "joven, con desparpajo, muy dinámico, cuyo estilo de juego me gusta mucho".

A pesar de que este sábado, ni tampoco el fin de semana siguiente, ante el Málaga, el entrenador bermellón no podrá ocupar su plaza en el banquillo, ha afirmado que seguirá los choques "atacado de los nervios". Sobre su expulsión en Sabadell, ha comentado que el árbitro tomó esa decisión únicamente porque se quejó de que solo se añadieran cuatro minutos al tiempo de prolongación.

En su opinión, la expulsión fue "injusta", y ha asegurado "no entenderla". Aún así, ha expresado su máxima confianza en su ayundante, Pedro Rostoll, que será quien dirigirá al equipo desde el área técnica: "Él sabe lo que quiero y lo que buscamos. La confianza es plena", ha remarcado Luis García.