, en colaboración con el Servicio de Protección de Especies de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural.
El árbol, de gran valor simbólico y natural, fue catalogado por la Comunidad Autónoma como parte del patrimonio vegetal de la ciudad de Palma.
A lo largo de los últimos meses se han realizado diversas visitas e inspecciones al árbol, así como un análisis foliar para evaluar su estado y determinar las mejores acciones para su conservación.
El resultado de estos estudios ha dado lugar a la decisión de realizar una poda de rejuvenecimiento y eliminación de ramas secas, que ha realizado Tragsa por encargo de la Conselleria, con el fin de mejorar la salud del árbol y evitar su progresivo deterioro.
Además, se han programado dos tratamientos con producto fitosanitario este pasado mes de febrero, para combatir de forma natural la plaga de cochinilla.
A lo largo de este año se llevarán a cabo otros tratamientos similares en horario nocturno adicionales durante las diversas fases de emergencia de las larvas de cochinilla, especialmente en primavera y a principios de otoño, para reducir su incidencia y garantizar la salud y la longevidad del olivo.
El trabajo conjunto entre el Ayuntamiento y el Servicio de Protección de Especies de la Conselleria refuerza el compromiso con la conservación de este árbol centenario, que sigue siendo un símbolo de la ciudad y un punto de referencia en la plaza de Cort.