Con todo, en función de la demanda, esta distribución inicial se puede modificar una vez terminado el plazo de presentación de solicitudes.
Se pueden subvencionar puntos de carga semirrápida (hasta 22 kW) y rápida (más de 22 kW), para uso interno y también para uso público. Para puntos de uso interno, se podrá subvencionar hasta un 40 por ciento del gasto, con un límite de 3.000 euros para puntos de semirrápida y de 30.000 euros para puntos rápidos.
Si el punto se hace accesible para uso público, se podrá subvencionar hasta un 50 por ciento del gasto. Se podrá recibir hasta un máximo de 50.000 euros por beneficiario, excepto si hay un sobrante del presupuesto.
El plazo para presentar las solicitudes es de dos meses y el plazo de ejecución de las instalaciones es hasta el 15 de noviembre de 2018.
La Conselleria ha recalcado que esta iniciativa va en la línea de apostar por la implantación de la movilidad eléctrica y de un modelo de economía medioambiental más sostenible. Baleares es la comunidad con más puntos de recarga: actualmente hay instalados 300 puntos con la posibilidad de cargar en el 95 por ciento de los municipios de las Islas.