DEPORTES | El Reus le empató en el minuto 75
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El Reus no ha aflojado hasta conseguir el empate |
Salto pequeño del Mallorca (1-1)
Por Redacción
domingo 22 de enero de 2017, 17:00h
Marcaron y bajaron los brazos. El Mallorca se vuelve a la isla con un solo punto después de que el Reus le empatase 1-1. Un encuentro que pintaba 0-1, para los bermellones, pero que terminó en mediocre por una actitud conformista.
Los bermellones han firmado una buena primera parte. Cabrero salvaba del primer mazazo parando un penalti en los primeros minutos y a partir de ahí, siempre a más. En el minuto 16, Lekic se hacía con un pase en profundidad y tras quedarse solo ante el portero, lo batía. Supieron aguantar el resultado hasta el descanso.
Ya en el segundo tiempo, el juego bajaba de intensidad con un par de ocasiones para el Mallorca -Moutinho estrellaba un balón contra el palo en el 55 y Sasa lo intentaba en el 71- y de hecho, ambos equipos se quedaban con uno menos. Los isleños perdían concentración y bajaban la guardia y a falta de 15 minutos, los locales marcaban: jarro de agua fría, con la firma de Máyor. Cabrero, además, salvaba de la tragedia en el 40 con un paradón.
El Mallorca no termina de despegar.
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El Mallorca se conforma con poco (1-1)
Últimos comentarios de los lectores (3)
175511 | Tomás - 22/01/2017 @ 20:23:09 (GMT+1)
La redacción de deportes de mallorcadiario rezuma mallorquinismo por todos los costados.
175505 | Utzzzz - 22/01/2017 @ 18:19:52 (GMT+1)
Ya damos por bueno un empate en casa del Reus. El Mallorca, orgullo de su afición, que ganaba en el Bernabéu y el Nou Camp ha muerto. Ahora no puede ganar en el Estado Municipal de Reus. Y con el empate la afición queda satisfecha. No queríais inversores americanos?. Pues aquí están. Que pena de Magnate.
175504 | jm - 22/01/2017 @ 17:55:01 (GMT+1)
De verdad que ver a este equipo jugar es insufrible. Cualquier equipo de 3ª juega con más criterio que esta banda de jugadores. Sigo desde que tengo uso de razón al Mallorca y jamás lo he visto arrastrarse tanto. La defensa es más blanda que el equipo de mi barrio, centro del campo que no toca un balón en condiciones y atacantes más quemados que el cenicero de un bingo (Lekic lo único a salvar). Yo paso, que hagan lo que quieran, a partir de hoy me es indiferente, no pienso cabrearme más por este equipo.