La novedad de la sesión la ha protagonizado la charla a pie de campo llevada a cabo por el propietario y presidente, Ingo Volckmann, para que la plantilla fuera consciente de la importancia del partido del domingo. Para ello había convocado también a dos ex presidentes del club, Fernando Crespí y Toni Garau y al ex directivo Fernando Miró, además de todos los empleados del club y algunos socios ilustres.
El entrenador blanquiazul, Mánix Mandiola ha señalado tras la sesión de entrenamiento que "por primera vez el domingo sí es una final. Ganar nos puede hacer salvarnos matemáticamente, de ahí la trascendencia, los nervios y la expectación. La fuerza está en el grupo, pero es verdad la importancia del compromiso de jugadores como Xisco, Fullana o Vallori".
Mandiola ha señalado además que "la experiencia te ayuda a convivir con esta presión, hay gente que mejora su rendimiento y gente que en estas situaciones no. La mayoría deben ser positivos y debe dar la cara. Nos puede bastar solo con centrarnos en lo nuestro. Ya dije que si ganamos los partidos de casa nos salvábamos. Tenemos la suerte de depender de nosotros".
Sobre el rival, ha apuntado que "el Ebro es un equipo enrachado, el mejor de toda la segunda B en los últimos partidos".