Los pirómanos vuelven a la carga: nuevas quemas de contenedores en Palma

Una noche más, el fuego ha sido protagonista en Palma. Esta vez en una zona cercana a la calle Manacor, en concreto en Lluís Martí.

Las llamas han calcinado una batería de contenedores, tal y como se observa en las imágenes registradas por un vecino.

La celeridad de los Bombers de Palma ha evitado que el fuego se propapagara y afectara a los vehículos estacionados.

🔴Esta noche los vecinos de Luis Martí han vivido el último episodio de salvajismo urbano en Palma.

Por unos #BarriosSeguros donde vuelvan a reinar la Ley y el Orden.@UHmallorca@uhradiosucesos@diariomallorca@ok_baleares@mallorcadiario@CronicaBalear_@Fibwi4 pic.twitter.com/5jrjmTqAj4

— Sergio Rodríguez 🇪🇸 (@sergiorgari) March 16, 2022

También en Palma, efectivos de los Bomberos acudieron a última hora de este pasado martes a la calle Sant Novici donde se encontraron con el incendio de cuatro contenedores.

El fuego y el humo ha afectado a la fachada de un edificio de cinco plantas en la calle Son Pontivic, así como al cableado eléctrico por lo que los efectivos se vieron obligados a dar aviso a Gesa.

PALMA EN LLAMAS

La semana pasada ardieron las terrazas de dos restaurantes- el 'Rodeo Grill' y el 'Cor barra i taula', este último propiedad del reconocido chef mallorquín Santi Taura- situados en las inmediaciones de la plaza del Olivar, no muy lejos del popular mercado.

Pocos días antes, cinco contenedores de basura situados en la calle Miquel Villalonga de Palma quedaron completamente destruidos a raíz de un fuego que afectó también a cinco turismos, una motocicleta y a dos fincas cercanas. Paralelamente, otro fuego intencionado afectaba a un vehículo y a un establecimiento en General Riera.

A mediados del pasado mes de febrero, dos incendios provocaron graves daños tras quemarse varios contenedores en Can Pastilla y en la calle General Riera. Los contenedores quedaron totalmente calcinados, y resultaron dañados el bajo de uno de los edificios y un coche aparcado. El fuego causó una gran alarma entre los vecinos de la zona.

Cabe recordar que, antes de la pandemia, ardieron cientos de contenedores en Palma de forma intencionada. De hecho, varias personas han sido condenadas por ello.

El coste aproximado de cada contenedor es de unos 1.000 euros: 700 euros por cada unidad más los gastos derivados de la limpieza, la retirada de residuos y su transporte.