Sergio Galdón Garau es el propietario de la ganadería de toros de lidia El Onsareño, la única con hierro propio presente en las Balears. Cría toros en Son Ferriol que ya han participado en novilladas y corridas. Sus toros estarán presentes en buena parte de las corridas de la temporada mallorquina. Galdón es un joven empresario, la tercera generación de una familia ganadera originaria de Jaén. Mallorcadiario.com ha hablado con él para conocer su opinión sobre la llamada ley de “toros a la balear”. De momento no es más que un anuncio en el que se plantean medidas como controles antidoping a toros y toreros; corridas de media hora; limitación a tres toros por festejo; ausencia de picadores y banderilleros...
¿Han hablado con alguien del Govern sobre la futura ley de toros?
No nos ha llamado nadie, para nada. No han tenido la menor intención de contar con nosotros, ni con nuestra ganadería, ni con la plataforma de Taurinos Unidos, ni con nadie. No se informan, no consultan. Ni siquiera han consultado el Reglamento Taurino nacional. De haberlo hecho se darían cuenta de que su propuesta es anticonstitucional. Quieren sobrepasar unas leyes nacionales. La propuesta de ley es una tontería, se ve al leerla, no sabes si echarte a reír o echarte a llorar.
¿Han tenido algún contacto con los partidos de la oposición?
Tampoco... Algún político del PP nos ha mostrado su apoyo a título personal, pero como partido no nos ha contactado nadie, ni del PP, ni de Ciutadans ni del PI. Ni izquierda ni derecha se implican ni se preocupan por la tauromaquia. Van a los suyo, a calentar la silla. He estado en varios plenos del Parlament y me ha dado pena. Ves allí a uno durmiendo, a otro con el móvil... Da mucha pena, a mi me han enseñado a estar atento y a escuchar a los demás cuando hablan.
En el caso de que la ley se tramitara tal y como se ha propuesto, ¿presentarán alegaciones?
Por supuesto, nuestro gabinete jurídico está en ello. Trabajamos junto a la Fundación Toro de Lidia y a la Asociación de Criadores de Toro de Lidia. Presentaremos alegaciones y si se aprobara la ley seguiríamos adelante. Queremos y seguiremos criando toros de lidia en Mallorca. Las condiciones que proponen son del todo inviables.
¿Inviables para promotores o para ganaderos?
Para todos. El Govern ha buscado los resquicios legales a los que se puede agarrar, no para regular, sino prohibir los toros que es lo que quieren conseguir. Ellos dicen que no van a prohibir los toros cuando en realidad están poniendo todas las trabas para que sea imposible.
¿Ha hablado con los animalistas?
He invitado a animalistas y antitaurinos a mi finca para que vengan y vean lo que hay. Desconocen como es la cría del todo bravo, lo que come, como vive... Pero pasan, no quieren informarse. Los animalistas están todo el día presionando a los políticos. Yo no tengo tiempo para esas cosas, trabajo todo de sol a sol. Yo me hago una pregunta: ¿de quién cobran las asociaciones animalistas? Dicen que son entidades sin ánimo de lucro, pero hay integrantes de estas asociaciones que son candidatos o han ido en las listas electorales de ciertos partidos políticos. Tienen montado un tinglado.
¿Que le parece que fiestas populares como el bou de Fornalutx pudieran quedar al margen de la futura ley?
No lo entiendo.... Si una cosa es maltrato animal, la otra también. ¿Por qué intentan separar el bou de Fornalutx de las corridas? Quieren contentar a todo el mundo y eso no puede ser.
¿Cree que la sociedad demanda la abolición de la tauromaquia?
Si la fiesta tiene que morir, que muera sola. Será porque el público le da la espalda y deja de ir. No morirá porque lo digan los políticos. Hay tradiciones que se pierden. Lo que no podemos tolerar es que nos impongan su fin porque ellos quieren. Defendemos la libertad de cada uno para ir adonde quiera. ¿En qué democracia vivimos?
¿Qué pesa más en la propuesta del Govern, la política o las presiones animalistas?
Creo que se da la suma de ambas cosas. La parte política no es menor. Se acostumbra a considerar a los toros como algo españolista, facha. Mucha gente lo ve así, a independentistas y catalanistas les molesta. Me parece muy bien que así lo piensen, cada uno es libre de defender lo que quiera, pero los toros no tienen ideología, hay aficionados de izquierda y de derecha. Eso de que a la plaza solo van fachas no es cierto. Insisto, hay taurinos de todo color político. Por otra parte, respeto a las plataformas antitaurinas. Entiendo que vean en la fiesta un espectáculo violento y que les disguste porque hay sangre y la muerte está presente, tampoco nos vamos a engañar. Les pido que nos entiendan y que nos respeten.
Me gustaría comentar con usted algunos puntos anunciados sobre la regulación de la tauromaquia. Dicen que sólo se podrán lidiar toros de cuatro a seis años de edad y con un peso comprendido entre 410 y 480 kilos.
Eso es inviable. Ellos dicen que se puede lidiar un toro de hasta seis años. No tienen ni idea, desconocen que un toro de más de cinco años desarrolla una fuerza que hace imposible la lidia. Dudo de que alguno de los que han hecho la propuesta haya pisado una plaza o una ganadería.
No se permitirá picar y banderillear al toro.
¡Que va! A partir de los tres años, los novillos se tienen que picar. De lo contrario no se pueden torear, sería como nadar entre tiburones hambrientos. Un torero ante un toro de 500 kilos sin picar sólo tiene dos caminos: el del hospital o el del cementerio. Es una insensatez.
Según propone el Govern, solo se podrán lidiar tres toros por festejo, lo que daría lugar a una corrida de media hora.
¿Alguien se imagina que un empresario va a pagar 9.000 euros por un toro, que es solo el valor de lo que come en su vida, para un festejo limitado a tres toros? ¿Media hora de espectáculo? Es ridículo. Nadie pagará para ver una corrida de treinta minutos.
Sobre los controles antidoping le planteo una pregunta clara: ¿qué hay de cierto en la idea de que se droga a los toros para que sean “dóciles” en el ruedo?
Eso es falso. Una ganadería está muy controlada, tenemos constantes controles por parte de la conselleria de Agricultura. Me lo miran todo de arriba a abajo, vienen inspectores de Madrid, nos controla la Guardia Civil... Cuando un toro parte a la plaza se hace un primer reconocimiento veterinario en la finca, otro cuando llega a la plaza en presencia de la Guardia Civil, 24 horas antes de la corrida pasan un tercero, y otro más antes del sorteo. Además son sorteos públicos para que todo el mundo vea al toro. Dudo que cualquier veterinario profesional se juegue su carrera por drogar a un toro o falsear un informe. Solo en los espectáculos de rejones, y porque así lo dice la ley, se llevan los toros con las astas despuntadas para proteger a los caballos.
Por cierto, también se propone prohibir los rejones...
Lo quieren prohibir todo. ¿Y qué pasa con los caballos en los jaleos de Menorca, o es que no se estresan, no lo pasan mal en medio del gentío?
¿Qué le parece que se someta a los toreros y a sus cuadrillas a controles de dopaje?
¿Pero como va a salir a la plaza un torero drogado? Un torero drogado, con sus facultades menguadas, tiene pocas posibilidades en la plaza. Yo no digo que algún torero no se meta algo, eso es problema suyo, pero no lo creo.
¿Se puede prohibir que usted continúe con su actividad ganadera?
A nivel particular podemos continuar con la cría y con los tentaderos, eso no nos lo pueden prohibir. Nosotros nos regimos por el Reglamento Taurino nacional, el Govern no podría venir a prohibirnos nada. La actividad de un tentadero, que es donde se evalúan a los toros y se decide si se destinan a la lidia o a la reproducción o se descartan, no es competencia del Govern. Por eso estoy pagando unos impuestos al estado y asumiendo unos gastos que son una fortuna en servicios jurídicos y veterinarios.
¿Ve posible una prohibición de la tauromaquia como en Cataluña?
Creo que no, pero tampoco lo voy a dar por seguro. Viendo a los incompetentes que gobiernan en la comunidad autónoma, los creo capaces de cualquier tontería. Hay una sentencia del Constitucional que dice que en Cataluña no se pueden prohibir los toros, aquí pasaría lo mismo.
Imagine que puede sentarse a tomar un café con la presidenta Francina Armengol. ¿Qué le diría?
Le diría tantas cosas... Lo primero que le diría es que no juegue con la libertad de las personas. Ella defiende más a unos que a otros, vivimos en democracia y tiene que haber gustos de todos los colores, eso tiene que respetarlo, es la presidenta de los taurinos y de los antitaurinos. Le pediría que antes de tomar una decisión se asesorara y hablara con el sector. Y, por supuesto, que antes de redactar un proyecto de ley tuviera en cuenta la legislación nacional.