Si había alguna esperanza, se ha volatilizado. La nueva Constitución de Cuba no contemplará el derecho al matrimonio de las parejas homosexuales. La comisión que elabora el borrador, encabezada por el líder del Partido Comunista Raúl Castro, ha decidido eliminar cualquier referencia a la cuestión.
Está previsto que la Asamblea nacional vote el borrador en unos días y que el texto se someta a un referéndum popular en los próximos meses. Todo apunta a que se aprobará sin sorpresas, “a la búlgara”.