Cae el cabecilla de una 'Banda del Rolex' relacionada con la mafia napolitana

En su vivienda se encontraron 14 relojes de alta gama valorados en unos 300.000 euros

Según ha informado la Policía en un comunicado, el detenido se encontraba asentado en Ibiza desde hacía algunos años y regentaba una empresa dedicada al alquiler de motocicletas.

Precisamente, las pesquisas realizadas en relación a esta empresa hicieron sospechar a los investigadores que el presunto autor pudiera estar dando apoyo logístico a los "grupos de acción" desplazados desde Nápoles para ejecutar materialmente los robos.

No obstante, en las labores de investigación se comprobó que la labor del denunciado iba más allá que la del apoyo logístico, ya que se ha constatado que él mismo se encargaba de pilotar las motocicletas de su empresa para facilitar la huida de los autores después de cada robo.

Además, él mismo sería el encargado de recibir y ocultar los relojes inmediatamente después de su sustracción a la espera de que pudieran ser sacados de la Isla.

Con todo ello, el grupo de la UDYCO de la Brigada de Policía Judicial de la Policía Nacional en Ibiza, el pasado 8 de noviembre, arrestó al joven y en el registro de su domicilio encontró 14 relojes de alta gama y 48.000 euros en efectivo.

Una vez analizados todos los elementos de prueba, se imputan al presunto autor un total de ocho robos con violencia cometidos en Ibiza. El presunto autor pasó a disposición judicial y el Juzgado de Guardia acordó su ingreso en prisión sin fianza.

BANDAS DEL ROLEX

Las denominadas 'Bandas de Rolex' de origen napolitano son grupos organizados de carácter itinerante que actúan en las principales zonas turísticas del territorio español.

Llegan a estos lugares durante la época estival haciéndose pasar por turistas y elaboran un estudio detallado de los lugares frecuentados por el turismo de lujo, analizando las principales vías de acceso y salida de las localidades en las que operan.

Posteriormente, comienzan a actuar eligiendo a las potenciales víctimas sobre las cuales realizan seguimientos discretos hasta que consideran que se dan las condiciones oportunas para abordarlas empleando violencia física, sustrayendo el reloj de un fuerte tirón.

Acto seguido emprenden la huida a bordo de una motocicleta que permanece en las proximidades del hecho conducida por una segunda persona.