
Hacia el mediodía de este domingo, unos jóvenes que practicaban surf en aguas de la
Colònia de Sant Jordi han descubierto en las rocas, junto al puerto, el
cadáver de un tiburón.
Se trataría de una cría de tiburón de una familia aún por calificar por los expertos. Mide
2 metros de longitud y, al parecer, le falta una aleta.
Multitud de curiosos se han acercado a la zona. Ellos han sido los que han dado aviso a la Policía Local.
Fue el tema de comentario durante todo el domingo en la zona. El desconocimiento de las circunstancias de esta aparición ha provocado preocupación entre residentes y visitantes en la zona justo al inicio de la temporada de baño.