El Sindicato Médico pide al Govern que se deje de cuentos porque la sanidad está al borde del colapso

El Sindicato Médico de Baleares (Simebal) ha criticado duramente las medidas adoptadas por el Govern en el Hospital de Manacor y ha pedido al Govern que se deje de cuentos sobre la calidad asistencial, porque en estos momentos “Mallorca se encuentra al borde del colapso asistencial”.

La organización sindical, que asegura que “el tsunami de Inca ya ha llegado a Manacor”, se hace eco de la nota oficial emitida ayer por el Govern, en la que señalaba que el hospital llevará a cabo, a partir de mañana, 1 de febrero, una reestructuración en la plantilla de facultativos del Servicio de Urgencias, por lo que en lugar de 20 médicos de guardia presencial habrá sólo 15 y se reduce también un turno de enfermería.

Esta medida, “enmarcada dentro del Plan de Control del Déficit de la Comunidad Autónoma”, no implica, según el Ib-Salut ninguna merma en la asistencia, ya que “se “continuará garantizando, en todo caso, la calidad asistencial de los pacientes del sector de Levante”.

No obstante, el Sindicato Médico afirma que, como es “muy fácil deducir para cualquier facultativo mínimamente de lo que es un hospital, esta medida supone la práctica imposibilidad de, tal y como está sucediendo en Inca, practicar intervenciones de urgencia”.

Y es que, “queda únicamente un anestesista para cubrir emergencias inmediatas de Obstetricia y Cirugía por la noche”.

NINGUNA EMERGENCIA QUE PRECISE RADIOLOGÍA

Igualmente, “al no disponer de radiólogo en horas nocturnas, cualquier accidentado o urgencias que precisen apoyo y diagnóstico radiológico, así como complicaciones de pacientes ingresados, tampoco podrán ser atendidas en el Hospital de Manacor”.

Así las cosas, el Sindicato Médico ha señalado que ya va siendo hora de que “desde el Govern se explique con claridad a los ciudadanos que lo de la calidad asistencial está garantizada es, a estas alturas, un cuento de Caperucita Roja”, así como que “con las seguras consecuencias que van a tener estas medidas ,la sanidad de la isla de Mallorca está al borde del colapso asistencial, pues la sobredemanda sobrevenida no podrá ser absorbida por Son Espases y Son Llàtzer”.