Winona Ryder y Keanu Reeves protagonizan este viernes 'La boda de mi ex'

Frank (Keanu Reeves) y Lindsay (Winona Ryder) se encuentran camino a una romántica boda en un viñedo en la suntuosa región vinícola del centro de California, y su relación comienza con el pie izquierdo. Las cosas empeoran aún más cuando se dan cuenta de que el novio, el medio hermano de Frank y a quien éste detesta, es el ex novio de Lindsay. Después de aceptar ignorarse mutuamente, se sienten indignados al descubrir que los han emparejado durante todas las actividades del fin de semana y ubicado en habitaciones contiguas en un íntimo bed and breakfast. Obligados a tolerarse durante esos tres días, cuyo programa incluye degustación de vinos, masajes de pies y juegos sin sentido, Lindsay y Frank descubren que, además de su necesidad de tener siempre la última palabra, comparten el mismo sentido del humor. A medida que sus constantes peleas se convierten en una alianza inesperada, pasan el tiempo criticando la fiesta, a los novios y abucheando viejas películas en televisión. Un roce con el peligro los acerca inesperadamente, pero queda por ver si pueden, o incluso quieren, continuar su romance en el mundo real. Repleta de humor sarcástico y bromas rápidas, ‘La boda de mi ex’ es una mirada poco convencional y extremadamente ingeniosa sobre dos inadaptados decididos a no dejarse engañar por el amor.

‘La boda de mi ex’, escrita y dirigida por Victor Levin, está protagonizada por Keanu Reeves (‘John Wick’, ‘Matrix’) y Winona Ryder (‘Stranger things’, ‘Cisne negro’), y producida por Elizabeth Dell, Robert Jones y Gail Lyon. La dirección de fotografía está a cargo de Giorgio Scali (‘Homeland’); el diseño de producción, de Callie Andreadis (‘True detective’); la edición, a cargo de Matt Maddox; el diseño de vestuario, de Justine Seymour; y la música original de William Ross. David Dinerstein, Cassian Elwes, Wayne Marc Godfrey, James Harris, Mark Lane, Jason Resnick, William Sadler, Jean Wyman y Pam Dixon son los productores.

Después de haber actuado juntos en tres películas, incluyendo la gran película de Francis Ford Coppola, ‘Drácula de Bram Stoker’, y la adaptación animada de Richard Linklater de ‘Una mirada a la oscuridad’, de Philip K. Dick, Reeves y Ryder tienen una gran dinámica en pantalla que refleja su amistad fuera de ella. “Su relación era algo súper importante”, dice Levin. “No puedes obligar a las personas que tengan química. La química tiene que surgir por sí misma, y el trabajo del director es hacer el mejor uso de ella”.

Para Levin, la amistad de los actores le permitió apropiarse de los personajes e incluso, a veces, del diálogo, y comparte: “ambos son naturalmente divertidos. Quería que se sintieran libres y si eso significaba cambiar algunas palabras, no quería ser riguroso al respecto. A veces obtienes un gran momento que nunca esperaste. Ellos saben lo que hacen”. Reeves, quien primero se convirtió en una estrella interpretando a Ted Logan, en ‘Las Alucinantes Aventuras de Bill y Ted’, y creó personajes icónicos como el Neo de ‘Matrix’ y el asesino John Wick, no sería el primer actor que se me viene a la mente para interpretar a un depresivo cascarrabias, reconoce Lyon. “Pero él definió el papel. Keanu tiene un sentido natural de entrega. Es una persona súper divertida con un sentido del humor mordaz, y es un placer trabajar con él. Creo que para él fue divertido demostrar un lado que no se había visto antes, que le permitiera mostrar una parte de cómo es él como persona”. Levin elogia la inteligencia, la sensibilidad y la preparación del actor para el papel. “Keanu se preocupa por cada palabra de la página y toma decisiones basadas en tiempo y esfuerzo”, dice. “Una vez que decide cómo abordar algo, lo hará al 100%”.

El complicado pasado de Frank incluye eludir la metralla emocional de los dos matrimonios de su madre, y su historia con su padre. Y aunque nunca tuvo una relación cercana con su medio hermano Keith, el tiempo los ha alejado aún más. “Tuvo una mala infancia por parte de sus padres, es algo que nunca pudo superar”, dice Levin. “Para Frank, el amor es un algo estúpido, y no quiere saber nada al respecto”. Reeves describe a su personaje como un “misántropo con una excesiva sensación de inseguridad”. Y agrega: “me gusta su ingenio. Uno se pone del lado de Frank. Yo me pongo del lado de Frank. Cuando conoce a Lindsay, él está tratando de superar su pasado y se siente atraído por ella”. Aunque Frank y Lindsay tienen ideas afines en muchas maneras, son opuestos en un aspecto crucial, observa el actor. “La diferencia entre ellos es que Lindsay, en el fondo, todavía tiene esperanza”, dice. “Ella reconoce que hay algo entre ellos, algo por lo que vale la pena apostar. Frank, al principio, no piensa eso, pero eso lo hace aún más romántico y divertido”. Es probable que Frank haya encontrado un alma gemela en Lindsay, quien comparte su cínica visión del mundo, pero para él es muy difícil creer que una relación durará, según Reeves. “El amor es algo bueno para los demás, pero él sabe que para él terminará en un desastre. Entonces, ¿para qué molestarse? Ahórrate el sufrimiento”.