La Policía Nacional detiene a tres patrones de pateras

Tras la llegada de numerosas pateras a las costas de Mallorca, la Policía Nacional inició sendas investigaciones que han llevado a la detención de los tres hombres así como de un cuarto, miembro de la tripulación, sobre el que constaban dos reclamaciones judiciales.

Las organizaciones dedicadas a favorecer la migración clandestina se encuentran ubicadas en la zona de la costa del noreste de Argelia, Estas organizaciones están compuestas por los “conseguidores” que los que ofrecen el viaje a España en patera por una cuantía de unos 1.000 euros por persona. La oferta de estos viajes se llevan a cabo en distintos establecimientos públicos de Argelia y se ofrecen principalmente a jóvenes varones, encargándose asimismo de recaudar el dinero.

Otro miembros de la organización se encargan de conseguir todos los útiles para realizar el viaje, tales como la embarcación, el combustible, el motor y un dispositivo de GPS pero también se hace necesaria la presencia de un patrón, que es quien dirige y conduce la embarcación.

El pasado 1 de agosto se recibió una llamada tanto en salvamento marítimo como en la sala del 091 desde una patera y solicitando ayuda dado que se encontraban a la deriva tras más de 40 horas de tránsito, enviando las coordenadas en las que se encontraban.

Una vez rescatados se procedió a la detención de 21 ciudadanos de origen argelino por la entrada ilegal dándose la circunstancia que entre los pasajeros de la embarcación se encontraban una mujer y su hija de 3 años de edad. En el momento del rescate los integrantes de la embarcación manifestaron que habían temido por sus vidas dado que se habían desorientado realizando un trayecto de más de 40 horas, cuando lo habitual es realizarlo en unas 20.

La Policía Nacional pudo determinar que dos de las personas que iban a bordo, dos varones argelinos de 29 y 27 años de edad, no eran meros migrantes sino que eran los responsables de capitanear la embarcación ilegal con destino a Mallorca.

Un día antes, el 31 de julio, se había interceptado otra patera en la que viajaban 17 personas, entre ellas 7 subsaharianos y 3 menores de edad. Entre los migrantes iba un joven de 20 años de edad que ya había estado en España y sobre el que constaban sendas reclamaciones judiciales por robos en Alicante, procediendo a su detención por estos hechos.

Tras diversas gestiones de investigación se determinó que otro de los tripulantes de la embarcación, era el patrón que la organización había designado para realizar el viaje, procediendo asimismo a su detención imputándole un delito contra los ciudadanos Extranjeros.