Parc de la Mar, una obra necesaria que acarreará molestias

Esta semana han comenzado las obras de remodelación y acondicionamiento del Parc de la Mar en Palma. La obra se prolongará durante cinco meses y someterá la zona a una profunda mejora del suelo, la vegetación y el mobiliario urbano. Se trata de una actuación necesaria, que costará casi 850.000 euros, y que intervendrá en una zona notablemente degradada, a pesar de ser uno de los entornos de mayor concentración turistas que visitan la capital.

Los trabajos permitirán renovar 3.900 metros cuadrados del pavimento del parque con nuevas baldosas. Asimismo, se renovarán 240 metros de barandillas, puente o escaleras, así como otros 73 metros del arcén que delimita el lago. También se van a renovar fuentes, papeleras y bancos, a la vez que se realizan mejoras de la accesibilidad y se instala una nueva iluminación con luminarias led y puntos de luz en el suelo para la iluminar el mural de Miró.

En conjunto, es una actuación de gran envergadura que permitirá actualizar una zona que lo necesita desde hace años. Es una obra necesaria, aunque acarreará molestias a quienes frecuentan la zona, especialmente en la temporada alta de turismo, que es cuando han comenzado los trabajos.

De momento, este lunes ya se produjeron cortes puntuales del carril derecho de la Avenida Gabriel Roca a la altura de la rampa del Parc de la Mar para facilitar la entrada de materiales. Para evitar la congestión, los trabajos se han programado por sectores. Durante estos primeros días se va a cerrar el perímetro de la obra con vallas y se retirarán una docena de árboles que se han detectado que están en mal estado y que serán sustituidos por nuevos una vez que haya concluido la intervención.

Las molestias se van a prolongar, como mínimo, hasta diciembre, siendo especialmente notorias en los meses de mayor afluencia de turistas, ya que el entorno es parada obligada para gran parte de aquellos que visitan Palma. En todo caso, el resultado final de los trabajos redundará en un incremento del valor patrimonial y paisajístico de la zona; a pesar de los inconvenientes puntuales que se sufrirán durante su ejecución.