Obras a destiempo en Playa de Palma

La primera y segunda línea de Playa de Palma están inmersas en una vorágine de obras que ha provocado un profundo enfado, principalmente, entre comerciantes y hoteleros. Los trabajos se iniciaron este lunes y se prolongarán durante varias semanas, en puertas del inicio de la temporada alta.

Ruidos, polvo y calles cerradas es lo que están encontrando los vecinos, los trabajadores y todos aquellos que visitan la zona. Reforma de aceras, iluminación, asfaltado, señalización... son obras que la zona necesita desde hace mucho tiempo, aunque pocos entienden que se hayan iniciado justo ahora, cuando ya han comenzado a llegar turistas y buena parte de la planta hotelera está abierta. En estos momentos se encuentran abiertos 73 hoteles en Playa de Palma, con una capacidad para 23.400 plazas; unos visitantes que ven alterada sensiblemente su experiencia turística en la zona. De hecho, las obras conllevan, además, modificaciones en los servicios públicos que prestan Emaya o los transportes públicos y taxis, que ven cerradas muchas calles.

Los afectados denuncian la imprevisión del Ayuntamiento de Palma y su urgencia por querer dar por concluidos los trabajos antes de las próximas elecciones de mayo. Los responsables municipales pueden argumentar que la financiacion de estas obras procede de una negociación que no se había cerrado antes, pero, cualquier lógica recomendaría que este tipo de trabajos deberían hacerse en temporada baja, cuando las molestias son mínimas.

Cort actúa a destiempo y con prisas, dejando que los turistas sufran importantes molestias y propiciando que los comercios vean reducidas sus cuentas de ingresos. Una mala decisión que no es la mejor forma de comenzar una temporada que se anuncia dura en cuanto a reservas y ventas.