A José Ramón Bauzá se le ha colado el enemigo en su propia casa. El alcalde de Manacor, Antoni Pastor, ha salido a la palestra para criticar la modificación de la Ley de Función Pública, esa que hará que el catalán deje de ser un requisito y se valore como un mérito. Y para más inri lo ha hecho rodeado de todos los partidos de la oposición de Manacor.
Se trata de un aviso para el presidente de su partido por mucho que el alcalde manacorí lo niegue y se empeñe en desmentir que esta salida de pata de banco no es un ataque directo a Bauzá ni pretende con ello iniciar una guerra.
Lo cierto es que Pastor hace tiempo que está molesto por algunas de las decisiones que ha tomado el presidente popular y que le han afectado de forma más o menos directa como el hecho de sustituirlo como portavoz del partido en el Parlament. Por este motivo el de Manacor demuestra su enfado y a la vez su fuerza utilizando un tema tan sensible como la lengua para lanzar un dardo a Bauzá.