Hoyos ha afirmado que las obras están provocando un "caos circulatorio en el municipio y su práctica incomunicación". También ha asegurado que "resulta indignante ver colas kilométricas de vehículos, que nos están aislando del resto de los municipios y generando un caos circulatorio, mientras que a pie de obra únicamente hay dos operarios armados con un compresor y una escoba".
El regidor ha asegurado que "la situación en Andratx ahora mismo es límite, porque la incomunicación afecta a familias, empresas, proveedores de productos básicos y materiales de construcción, además de que las obras están bloqueando el paso a los servicios de emergencias, de ahí que la alcaldesa pidiera ayer una UVI móvil para el municipio mientras duren las obras".
Finalmente, ha reiterado "la necesidad de que las obras acaben cuanto antes, pero no solo porque deben estar preparadas para la próxima temporada turística", sino porque "los andritxols no pueden seguir aislados del resto de Mallorca por mucho tiempo".
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