Los agentes ha desmantelado este grupo criminal que había ideado un sofisticado sistema de reparto de diferentes drogas a domicilio.
Uno de ellos, bajo la apariencia de empleado de grúa, viajaba por toda la isla, donde, además realizar trasportes de vehículos, mantenía contactos y negocios de venta de drogas.
A su vez, otro repartía las drogas trasladándose en patinete eléctrico. Este tenía dedicación exclusiva ya que realizaba jornadas de 12 y 14 horas de trabajo, con numerosas ventas cada día.
En los cuatro registros realizados se han intervenido cerca de un kilo de drogas, más de 10.000 euros en metálico y útiles para el procesamiento y dosificación de las drogas.
También se han localizado diversas armas blancas, puños americanos y un arma de fuego simulada, tipo revólver.
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