A su llegada, los agentes hallaron a un joven que presentaba dos cortes: uno en el abdomen y otro en la mano, motivo por el que fue trasladado al Hospital de Son Espases, donde recibió varios puntos de sutura en las zonas afectadas.
Varios testigos comunicaron a los agentes que momentos antes se había producido una discusión entre dos hombres, ya que, al parecer, uno de ellos le había arrebatado al otro un recipiente que contenía cerveza. La discusión derivó en una pelea, y en un momento dado uno de los contendientes cogió una botella de cristal rota con la que agredió a su adversario en varias ocasiones, provocándole lesiones en la mano y ocasionándole un corte profundo en el abdomen.
Los testigos indicaron a los agentes el lugar por el que había huido el presunto autor de los hechos y les informaron de que también presentaba lesiones, concretamente un corte en la mano.
Los agentes siguieron el reguero de la hemorragia y llegaron a una finca donde se encontraba una mujer limpiando manchas de sangre en un portal. Los efectivos policiales interpelaron a la mujer, pero ella negó en todo momento que ninguna persona se encontrase en esos momentos refugiada en la finca.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación, recabando pruebas que permitieron identificar al sospechoso, quien fue finalmente detenido el pasado martes, a las 11.30 horas, en el barrio palmesano de Camp Redó.
Además, los agentes comprobaron que sobre el detenido pesaba una orden de alejamiento de su expareja, precisamente la mujer que estaba limpiando la sangre en el portal, razón por la cual se le añadió una segunda acusación por quebrantamiento de condena. El joven ha pasado a disposición judicial este jueves.