Por otra parte, la presidenta de CAEB ha destacado que “la desescalada anunciada por el Gobierno se ha definido con una total ausencia de diálogo social y haciendo caso omiso a las propuestas empresariales, lo que nos ha decepcionado porque no hacer caso a los que saben garantiza la inviabilidad de las propuestas.
Prueba de ello es que las condiciones de apertura tanto para hoteles, comercios, bares y restaurantes son inviables porque es más costoso abrir que mantener cerrados los establecimientos. En imprescindible que los plazos anunciados estén acompañados de medidas complementarias y que se mantengan las garantías que actualmente ofrecen los ERTEs. Si no es así, muchas empresas están abocadas al cierre y muchos ciudadanos, en lugar de tener un trabajo al que volver, acabarán teniendo que ir al paro”.