Una marcha que alcanza su edición número 45 y que se celebra cada primer sábado del mes de agosto, lo que obliga a cortar diversas carreteras y calles de Palma.
Como es habitual, han sido miles de personas las que se han apuntado para recorrer los más de 42 kilómetros que separan Palma del monasterio de Lluc.
En Palma se calcula que había unas 5.000 personasen la salida, donde reinaba un gran ambiente festivo, aunque no hay que olvidar que a lo largo del recorrido se van sumando más contingentes desde otras poblaciones mallorquinas (la marcha se inicia en Inca a las 5:00 horas).
Se espera que los primeros marxaires lleguen al monasterio sobre las 6:00 horas de la madrugada.