El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado este lunes que las deportaciones de inmigrantes ilegales se están llevando a cabo con "éxito". Estas redadas se enmarcan dentro del endurecimiento de la política migratoria de la Administración Trump, como respuesta a la caravana de miles de personas que el pasado octubre pretendieron llegar a Estados Unidos a través de México. El Trump justifica estas medidas porque los inmigrantes ilegales suelen ser "criminales" y personas conflictivas, por lo que, según él, suponen un peligro para el país.
Además, Estados Unidos pretende que los países emisores de inmigrantes endurezcan también sus controles migratorios. Para ello, Trump amenaza con retirar las ayudas que reciben e imponer aranceles a las importaciones del país emisor.