Los agentes de la Policía Nacional de Palma fueron requeridos en las escaleras del edificio de Jefatura por un joven estadounidense que les alertó de que su amigo, de la misma nacionalidad, se encontraba en mal estado y que podría sufrir alguna intoxicación alimentaria, ya que era alérgico a los frutos secos. El joven norteamericano de 22 años se encontraba en la escalera de la Jefatura con dificultad respiratoria y había perdido el conocimiento.
Los agentes acudieron rápidamente a su auxilio, comprobando cómo su estado iba empeorando por momentos. Presentaba dificultades respiratorias, hinchazón y el pulso era cada vez más débil,. Tanto, que llegó a perder la consciencia.
Ante la gravedad, los agentes se vieron obligados a realizar una reanimación cardiopulmonar durante seis minutos así como a usar el desfibrilador hasta la llegada de una ambulancia. La misma le trasladó a Son Espases donde permaneció ingresado durante 45 largos días.
Cuando el joven, natural de Ohio y que estudia empresariales, fue dado de alta y regresó a su país, donde la noticia tuvo gran acogida en los medios de comunicación. No obstante, a pesar de la mala experiencia, asegura que volverá a Palma.