Según ha explicado la regidora, un año después de que se pusiera en marcha el plan de limpieza, la entidad encargada de la higiene de las calles de la ciudad ha recogido 4.296 toneladas de residuos, frente a las 2.961 de 2017.
El aumento, según Cort, proviene del incremento de personal, que pasó de 505 técnicos en plantilla en 2017 a los 522 en 2018. Truyol ha querido recordar "la disminución importante en personal que hubo en los años 2013, 2014 y 2016, cuando las plantillas se situaban en torno a los 445 técnicos", cerca de 100 personas menos que en la actualidad.
Otro de los factores que han hecho aumentar esta recogida es la incorporación de 60 vehículos, entre los que se encuentran cinco escobas, 12 camiones polivalentes, 11 equipos de presión o seis camiones cisterna pesados.
Una de las novedades de la nueva maquinaria son las 21 escobas mixtas, dotas con un equipo de limpieza con agua y aspiración, que tienen capacidad para 1.200 litros de agua. Truyol ha asegurado que todas las calles de Palma cuentan en la actualidad con este tipo de limpieza, mientras que hace apenas dos años, solo se aplicaba en el centro de Palma y en la zona de la Playa de Palma en verano.
La frecuencia de la limpieza ha sido otra de las causas que han hecho sacar a la luz estos datos. Los barrios de Son Rapinya, la Vileta, Son Roca, Son Ximelis, el Rafal Nou, o el Vivero tienen ahora un "tratamiento diario", si bien puede variar según las circunstancias y necesidades y en función de la tipología de las calles.