En los conatos ardieron en total casi 9,6 hectáreas forestales y los tres incendios, registrados todos en Mallorca, quemaron 17,73 hectáreas.
El 95 por ciento de la superficie natural quemada en 2018 en Baleares es de Mallorca, con 26,1 hectáreas, mientras que en Menorca ardieron 0,1 hectáreas, en Ibiza 1 hectárea y en Formentera 100 metros cuadrados.
En 2017, en Baleares se quemaron 87 hectáreas de superficie forestal; en 2016 se alcanzó la cifra de 206 hectáreas; en 2015 ascendió a 104 hectáreas, y en 2014, quedaron calcinadas 49 hectáreas.
El peor año de la última década fue 2013, cuando el fuego arrasó 2.838 hectáreas.