La medida llega después de que la consellera de Salut, Patricia Gómez, anunciara en noviembre la intención de que a partir del 1 de enero todas las tarjetas sanitarias que se tramitasen volvieran a ser a coste cero. Gómez explicó en su momento que tomaban esta decisión para devolver a la sanidad de las islas su carácter universal.
Así pues, esta medida se engloba dentro de un paquete previsto a raís de la aprobación de los presupuestos de 2016, que preveían una dotación mayor (5,62%) para este área respecto al de 2015.