En la Provenza un frase popular reza: “un día sin vino es un día sin sol”. No sé si en Mallorca tenemos algún refrán o dicho que identifique la pasión por el vino que hay en nuestras islas, pero la anterior se puede adoptar perfectamente.
No solo existe pasión en Baleares por la cultura del vino, España es de por si un país que acompaña sus mejores propuestas gastronómicas con un buen caldo. Reunir a casi cien bodegas de todo el país es una experiencia religiosa, como diría Enrique Iglesias. Iberostar lo consiguió. Bajo el techo del Hotel Son Antem se condensaron las mejores bodegas españolas, con sus creadores trayendo de la mano a sus jóvenes o maduros hijos para presentarlos en sociedad. Una sociedad que con gran alegría aceptó el reto de probar lo mejor del vino español.
Por supuesto no faltaron los vinos de las islas, descubrimos Gallines & Foques un vino joven fruto de la colaboración entre Amdaip Esment y 4kilos Vinícola. La organización Amadip Esment participa activamente en todo el proceso de creación de este vino, un vino humano y con corazón.La bodega 4kilos no defraudó con su 12volts, de sabor profundo y maduro.
Otro vino muy recomendable es El Importante cuyos autores la bodega 7 pasos, nos mostraron un caldo sabroso, equilibrado con un toque amargo que embarga el paladar. De nombres curiosos como El Malo, El Figura o El Prenda esta bodega destaca por su originalidad y frescura.
El público pudo además degustar una serie de tapas, muy acordes para acompañar los diferentes caldos. Hubo vinos para todos los gustos, blancos, rosados, tintos y cavas.
Por todos los presentes se alabó el trabajo de organización de Iberostar, la Vinoteca y Terra de Vins, así como la idea de que hubiera transporte gratuito hasta el hotel. Una idea que seguro tendrá segunda edición.