Una reclamación muy política
El Govern de les Illes Balears en su reunión de este viernes acordó reclamar al Partido Popular 212.941,07 euros de la subvención electoral otorgada en 2007, siendo presidente de la formación Jaume Matas. Esta reclamación deriva de la revisión hecha de oficio tras la confesión judicial del contable del PP en aquella época, Fernando Areal, de que hizo pagos en negro por valor de casi 72.000 euros. Sin embargo, recientemente el Consell Consultiu determinó que la cantidad a devolver por parte de los populares es de unos 7.000 euros, cifra muy alejada de la reclamada ahora por el Govern.
El PP inmediatamente ha tratado de aprovechar la disparidad de cifras entre el Consell Consultiu y la Sindicatura de Cuentas, porque es evidente que antes de reclamar algo habría que determinar con total seguridad que la cantidad que se exige es la que procede. Pero el Ejecutivo de Armengol parece haber sucumbido a la tentación de inclinarse por la cifra más alta y es previsible que utilice la cuestión para restregárselo al PP de Biel Company, desgastando a los populares con el argumento de la corrución, aunque sea del año 2007.
La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Pilar Costa, mostró claramente que la rueda de prensa posterior al Consell de Govern que los partidos de izquierdas harán de esta reclamación un argumento permanente contra el PP, lo que hace sospechar que el acuerdo del Govern sobre los 212.000 euros tiene un elevado componente político. Eso explicaría que se ignore el dictámen de Consultiu para reclamar una cantidad menor a los populares.