Va bien, justo cuando va tan mal

Llevo toda mi vida viviendo aquí (como mucha otra gente) y nunca, jamás, ni en los momentos de más euforia económica, leí, ví o me dijeron que algún empresario haya dicho que las cosas iban excelentemente. Cada año en Navidades oímos que las ventas acababan de caer de un 20 a un 50 por ciento sobre el año anterior. En las rebajas, igual. Llevamos 50 años con estas caídas, de forma que hoy uno ya sabe que el comercio no existe. Ha llegado al cero.

Pero bien, es de justicia reconocer que el presidente de Pimeco, Bernat Coll, que la semana pasada declaró que se había producido un éxito comercial en el inicio de las rebajas, carece de precedentes.

Ustedes verán: ya sería el colmo que para una vez que dicen que las cosas van bien, encima sea un truco para animar el mercado. Ya sería paradójico que la única vez que dicen que va bien es precisamente cuando van mal.