
Más de
300 personas -entre trabajadores de Coca-Cola Iberian Partners (CCIB) y del sector de la seguridad privada y de los servicios auxiliares, así como familiares y sindicatos- han realizado este viernes una ruidosa protesta en la
Plaça d´Espanya de Ciutat contra el ERE de la compañía y los descuelgues de convenios en seguridad que provocan la reducción de su salario.

Tras los paros parciales realizados este martes y jueves, con esta concentración se pone el broche a las protestas durante esta semana y será el próximo
lunes 10 de febrero cuando comience la anunciada huelga indefinida por parte de la plantilla de la embotelladora de Palma.

Durante la concentración convocada por los sindicatos UGT y CCOO, el secretario del Comité de Empresa de UGT y miembro de la Mesa de Negociación de Coca-Cola, Juanjo Bustíns, ha asegurado que los empleados de Baleares mantendrán su posición
hasta que la compañía no abra el "marco de negociación".
Bustíns también ha realizado una llamada de atención al Govern, ya que después de la reunión mantenida con los trabajadores y la llamada de la Conselleria correspondiente, "aún no saben qué han hecho" ni "cómo se va a materializar su voluntad de apoyo.