Máxima alarma por el vandalismo que quema contenedores

Máxima preocupación por los nuevos episodios de quema de contenedores en la Playa de Palma. Este fin de semana han sido seis los contenedores que han ardido fruto del vandalismo, en acciones premeditadas que han obligado a los Bomberos de Palma a acudir en dos ocasiones durante la madrugada y la mañana de este domingo.

El suceso añade un eslabón más a la ola de incendios que se inició en Palma la última Nochevieja y que hasta abril supuso una veintena de contenedores incinerados, varios vehículos calcinados y decenas de vecinos desalojados de sus viviendas y atendidos por los servicios sanitarios. En esta ocasión, los daños se han reducido únicamente a los contenedores, sin tener que lamentar males mayores, pero el episodio ha provocado la alarma ante el temor de que se extienda en un área como la Playa de Palma en temporada de máxima afluencia de turistas, convirtiéndose en una "moda" más del incivismo que afecta a esta zona.

La policía no duda de la intencionalidad de los fuegos y ha intensificado la búsqueda de los responsables. La ciudad no puede permitirse un vandalismo de este calibre que haga peligrar la seguridad de bienes y de personas, por lo que hay que redoblar los esfuerzos policiales para frenarlo. En el caso de los incidentes que se han producido en una zona tan turística como la Playa de Palma y ante la sospecha de que se pueda tratar de turistas, es necesario, además, que las acciones policiales conlleven el mensaje de que no existe impunidad para este tipo de gamberradas.

Precisamente, el jefe de la Policía Local de Llucmajor (municipio que sufre en s'Arenal los mismos problemas que en la vecina zona de Playa de Palma) explicaba este domingo en mallorcadiario.com la necesidad de que en algunos casos las multas impuestas a los turistas incívicos puedan cobrarse en el momento de la denuncia sin esperar a procedimientos posteriores. Parece una medida útil y directa para atajar muchas acciones de este tipo, aunque no se puede soslayar la necesidad de aumentar las dotaciones policiales de forma que sea posible incrementar la vigilancia.