
El expresident Jaume Matas ha enviado una carta al Gobierno para pedir la conmutación de su pena privativa de libertad “por una de trabajo en beneficio de la comunidad, directamente vinculada si se quiere al hecho cometido”.
Matas pidió el indulto al Gobierno y entonces subrayó “la escasa gravedad del delito” y apuntó a los “efectos desocializadores” de entrar en la cárcel separándose del entorno familiar, afectivo, profesional y laboral.
El expresident fue condenado por los contratos con su redactor de discursos en el Govern, Antonio Alemany. Se le impuso una pena de 2 años y tres meses. Matas tramitó una petición de indulto a la que Fiscalía y Tribunal Supremo han respondido negativamente.
La cuestión es que considera que “no ha detraído dinero público” y que por ello, este delito de tráfico de influencias “no puede comprenderse en la denominada corrupción”, es un delito contra la Administración Pública.