
"La situación sigue siendo preocupante pero parece que las
expectativas son ligeramente esperanzadoras para este invierno”, lo dice el director de la Asociación de Constructores de Baleares,
Manuel Gómez. Sus declaraciones llegan semanas después de que el conseller de Economía, Joaquín García, asegurase que en la construcción "se está empezando a mover algo".
Según Gómez, la línea de actuación este invierno se abrirá a “la rehabilitación energética de establecimientos y las obras en unifamiliares -sobre todo de suecos, alemanes y rusos- son los pilares en los que nos vamos a apoyar. Es un paso más a la ya clásica remodelación de hoteles”, agrega.
Hay que recordar que la normativa europea persigue incrementar la eficiencia energética para alcanzar en 2020 un ahorro del 20 % del consumo. “De ahí la necesidad de adaptar todo tipo de establecimientos a la norma. Ahora es la época”.
Sin embargo, apunta que
no hay esperanza en el sector público. “Los Presupuestos Generales del Estado han sido una puñalada. No vamos a ver un euro aquí para infraestructuras así que debemos centrarnos en el ámbito privado”.
Asimismo, hace especial hincapié en que "el empleo tardará en crecer". Algo que respalda el presidente de las
Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) Baleares, Jerónimo Valcaneras. "Más allá de las cuatro chapucillas que muy pocos puedan hacer, no va a haber trabajo como para decir que crecemos".