La quinta gala de Supervivientes prometía mucho, y no defraudó. Las dos nuevas incorporaciones han dado mucho juego. Además se produjo
la unificación de las dos islas, por lo que los bonitos y los habitantes de playa Uva deberán compartir la misma arena.
No sabemos como le habrá sentado esta noticia a los concursantes, pero con lo quejicas que están siendo esta edición puede parecer que no muy bien.
A esta nueva convivencia se unen
dos nuevos Robison Crusoe:
Amador Mohenado y Rebeca.
El hermano de Rocío Jurado toma el relevo de su ex Rosa Benito y tratará de demostrar -
con calcetines blancos de por medio- todo lo que vale. Su salto con un look muy "british" fue uno de los más comentados en las redes sociales.
Rebeca, por su parte, está segura que va a ser una concursantes
"dura de pelar". La cantante y ex de Fran Rivera ha venido a la isla a dar todo de ella misma, aunque
su aparatoso salto la haya traído consigo las primeras molestias. Su trasero rojo llevó a la gala las risas y los comentarios acerca de ¿quién iba a curar a la pobre Rebeca?.