
Cada año que pasa, los artistas persiguen el éxito a través de los espectáculos más raros y extravagantes sobre el escenario, algo en lo que es una formidable experta
Miley Cyrus. Pero en esta ocasión ha sido el turno de
Lady Gaga. La diva del pop llevaba unos meses de tímida promoción con su último disco ‘
ARTPOP’, por lo que decidió actuar en el festival
SXSW de Texas.
La cantante marcó uno de los momentos más desagradables y virales de la noche, y de su carrera musical, durante la interpretación de la canción ‘
Swine’. La cantante estuvo acompañada por una modelo que no dejaba de beber de una extraña botella negra mientras paseaba por el escenario. En ese preciso momento, Gaga empezó a tocar la batería hasta que en mitad de la canción, la modelo que la acompañaba se acercó a ella y se autoprovocó un vómito verde que cayó sobre el delantal de la intérprete.
Por si esto fuera poco, durante el final de la canción ambas se montaron sobre un cerdo mecánico en donde proseguían con un festival de vómitos de colores y adoptaron
poses sexuales e insinuantes que invitaban a la imaginación de la persona más perturbada, .
Ante tal espectáculo,
Gaga tan sólo llegó a declarar a su público: “¡Que te den, música pop! ¡Esto es
ARTPOP! ¡Liberaos!”. Muchos medios ya han apostado que tan sólo se trata de una estrategia descarada y de mal gusto para logar conseguir un mayor número de seguidores, pero a qué precio.