La más difícil encrucijada de los socialistas
sábado 31 de mayo de 2014, 18:28h
No lo tiene sencillo el PSOE a la hora de acordar el sucesor o sucesora de Rubalcaba. Las diferentes federaciones van pronunciándose, mayoritariamente a favor de la andaluza Susana Díaz, pero todo apunta a una elección desde las bases, con derecho a voto por parte de todos los militantes. Tal método reforzará sin dura al ganador y dejará de lado la necesidad de hacer elecciones primarias para designar al candidato a la presidencia del Gobierno. Ya no hay duda: quien gane el congreso será el líder indiscutible en las próximas generales.
Por su parte, el PSIB espera a pronunciarse. Su secretaria general, Francina Armengol, nunca ha sido partidaria de los pasos en falso ni de las precipitaciones. Ya ocurrió en el congreso del año 2000, cuando los socialistas isleños, encabezados por entonces por Francesc Antich, esperaron hasta el último momento para pronunciarse, pero sabiendo apostar por quien resultó ganador, un por entonces desconocido José Luis Rodríguez Zapatero.
Habrá que ver ahora como se mueven los armengolistas. Pero conociendo a este avezado aparato es muy posible que acierten en sus movimientos y que salgan bien parados del envite. Es muy importante que los socialistas baleares estén bien situados en la dirección federal. En número son muy inferiores a las organizaciones más fuertes, como la andaluza o la madrileña, pero siempre han demostrado habilidad política para tener en Ferraz un peso superior al de su fuerza numérica. Ahora se mueven en el mismo sentido, conscientes de que de este congreso extraordinario de julio ha de salir para ellos el equilibrio y el empuje necesarios para poder abordar con garantías las elecciones autonómicas y locales de la primavera del año que viene.