La Guardia Civil a través de agentes de Fiscal y Fronteras del aeropuerto de Palma detuvo a la primera persona el pasado fin de semana.
Los agentes detectaron que un pasajero que se disponía a coger un vuelo hacia Barcelona portaba en su equipaje perfumes por valor de 5.400 euros.
Tras realizar las indagaciones correspondientes, descubrieron que habían sido sustraídos en una tienda del propio aeropuerto, ha indicado el instituto armado este viernes en un comunicado.
Al día siguiente descubrieron un equipaje facturado de grandes dimensiones, cuyo interior contenía una elevada cantidad de perfumes.
Tras seguir el protocolo establecido para estos casos, localizaron al propietario de la maleta y procedieron a la apertura en su presencia.
Una vez abierta la maleta, solicitaron al pasajero que pretendía abandonar la isla de Mallorca con destino a Rumanía, que aportara alguna factura o documento que acreditase la procedencia de la mercancía. Sin embargo, las respuestas que recibieron no fueron coherentes.
Por ello, procedieron a comprobar el origen de los perfumes, descubriendo que habían sido sustraídos de una tienda que se encuentra en el interior del propio aeropuerto, con una valoración de 8.400 euros, por lo que lo detuvieron por un delito de hurto.
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