mallorcadiario.cibeles.net
La fiebre de la comida a domicilio
Ampliar
(Foto: Javier Fernández Grupo La Siesta)

La fiebre de la comida a domicilio

Por Mercé Martorell
miércoles 25 de agosto de 2021, 12:40h

Escucha la noticia

Falta un día para que se declare el estado de alarma. Alexis empieza a trabajar en Natur Poke, un restaurante de comida hawaiana cuyos propietarios no saben que, a partir de mañana, el coronavirus cambiará el rumbo de su negocio. "A partir de ahora solo podremos crecer a través del take away" afirmará el jefe. Se adscribirán a todas las aplicaciones de comida a domicilio, desde Glovo, hasta Just Eat y aumentarán su plantilla de repartidores. Lo que no saben es que pasado un año y medio podrán realizar más de 100 bowls a domicilio diariamente y gracias al delivery, su empresa conseguirá sobrevivir a la pandemia.

Varios meses después, Manolo explica la situación de su negocio. Es un padre de familia que decidió abrir un restaurante hace seis años. Con el agua al cuello debido a la pandemia, decidió innovar y adaptar el funcionamiento de su restaurante para que las restricciones no le hundieran el negocio.

Por desgracia, el restaurante de Manolo y la empresa donde trabaja Alexis forman parte del 40 por ciento de los restaurantes que reconocieron en diciembre de 2020 que se verían obligados a cerrar sus puertas en los próximos seis meses de no ser por el delivery, o venta de comida a domicilio. Para el 57 por ciento de los restaurantes españoles, el servicio a domicilio es mucho más importante en 2021 de lo que ha sido hasta entonces.

El 40 por ciento de los restaurantes reconocieron en diciembre de 2020 que se verían obligados a cerrar en los próximos seis meses de no ser por el delivery

El servicio a domicilio está salvando del cierre a cerca del 40 por ciento de restaurantes

Según un estudio de Deliveroo

Leer más

A escasos 500 metros del Natur Poke se encuentra Miquel Font, encargado de MásNatural, un local de la Plaça d'Espanya. A diferencia de otros restaurantes, el MásNatural ha percibido con la pandemia un importante descenso en la demanda de pedidos para llevar. "La gente no tiene dinero", afirma Font. El teletrabajo se ha convertido en un problema para restaurantes como este, ya que en él se llevaba a cabo el famoso "social networking" entre empresarios, que disminuyó con las modalidades online.

Quienes han tenido mucha suerte son los propietarios y trabajadores de La Fornarina, un local de comida preparada de la calle Caputxins. Un negocio tradicional en marcha desde 1995 que no destruye ni la pandemia. Su propietaria afirma que no han cerrado ningún día: "si bien es cierto que durante los meses de confinamiento la demanda fue menor, puesto que no se celebraban reuniones, tras el estado de alarma, las restricciones y el cierre de la hostelería contribuyeron al crecimiento del negocio, pues la gente se reunía, pero en casa". Antes del confinamiento, La Fornarina "funcionaba gracias a la gente de la calle que nos conoce hace años". Sin embargo, el confinamiento les empujó a funcionar también a través de internet: se crearon un perfil en redes sociales, abrieron su página web, y lo que es más importante, empezaron a dar servicio a domicilio a través de la empresa mallorquina Angel24.

"Las restricciones y el cierre de la hostelería contribuyeron al crecimiento del negocio, pues la gente se reunía, pero en casa"

La demanda de comida a domicilio ha aumentado exponencialmente debido a la crisis sanitaria. Las restricciones de aforo en bares y restaurantes, el cierre de la hostelería durante meses y el "quédate en casa", han impulsado a jóvenes, personas mayores, parejas y grupos de amigos a consumir más comida a domicilio. A ello se le suman los principales motivos que existían previos a la pandemia: la rapidez en el servicio, la comodidad y la pereza de cocinar. De hecho, según un estudio de UberEats, 4 de cada 10 mallorquines piden comida a domicilio al menos una vez a la semana.

Y es que hasta las personas mayores se han sumado a la fiebre del take away. Luisa es abuela de 10 nietos que vive en el centro de Palma. Una vez al mes se reúne con ellos para cenar en su casa y ponerse al día de lo que sucede en sus vidas. Aunque a Luisa, a sus 78 años, le encante cocinar, no siempre tiene tiempo de hacer comida para tantos. Además, recoger y limpiar todo luego es a menudo muy cansado para Luisa. Por eso, la noche en que la visita su familia, llama al restaurante oriental más cercano y pide comida to take away.

Al mismo tiempo, Cayo y sus amigos han quedado para cenar en casa de Marcos. Suena la música y todos van ya por la segunda cerveza. Es hora de cenar y han decidido pedir comida a domicilio. “Cuando quedamos con los amigos en casa de alguien, esta opción es mucho más cómoda. De esta manera, todos podemos pedir lo que nos apetece, cada uno paga su parte, y el anfitrión no debe pasarse horas cocinando. Además, con el nuevo método de pago de Bizum, es muy fácil distribuir gastos” afirma Cayo. Al igual que muchos otros jóvenes, Cayo y sus amigos se han reunido en casa de Marcos debido a las restricciones de aforo y a los límites en reuniones de no convivientes en restaurantes. Cada vez son más las veladas que se hacen en casas, donde, para algunos, el coronavirus deja de existir.

"Todos podemos pedir lo que nos apetece, cada uno paga su parte, y el anfitrión no debe pasarse horas cocinando. Además, con Bizum, es muy fácil distribuir gastos”

El mismo día, en el Pont d’Inca, Francisca y Julián acaban de llegar a casa de ir a buscar a sus hijos de las actividades extraescolares. Mañana no hay clase y echan el Madrid-Barça. “¿Papá, mamá, podemos pedir unas pizzas para ver el fútbol?”, pide uno de sus hijos. A Francisca y a Julián les parece buena idea y llaman a la pizzería del barrio para acabar de disfrutar de la velada. Francisca y Julián son más flexibles con este tipo de planes desde el inicio de la pandemia: ni ellos ni sus hijos tienen la misma vida social que antes, de modo que algo tan sencillo como comer una pizza mientras ven el fútbol, es ahora uno de los planes más divertidos en tiempos de pandemia.

En Palma se encuentra Raquel, una joven de 26 años que pide comida a domicilio entre tres y cuatro veces al mes. Trabaja ocho horas al día, llega a casa pasadas las diez de la noche y, de manera esporádica, prefiere pagar un poco más con tal de no tener que ponerse a cocinar y limpiar. “Antes, cuando vivía en Marratxí, nunca pedía comida porque mi casa no entraba en el radio de los repartidores de Glovo o de UberEats… pero ahora, en Palma, puedo pedir lo que quiera”.

“A los jóvenes nos acusan de ser una generación que lo quiere todo al momento, sin tener que esperar. Por ello el Fast Food y la comida para llevar ha calado tanto entre nosotros” se autocritica Raquel. Además, afirma que “la carta y la aplicación me permiten exactamente lo mismo que alguien atendiéndome en persona. ¡Puedo incluso hacer mi pedido por Whatsapp! No me tengo que mover de casa ni tengo que arreglarme. Es normal que la comida a domicilio triunfe en tiempo de pandemia”. De vez en cuando, Raquel disfruta de la tranquilidad de su piso en Sindicat, estando en pijama, viendo su serie favorita y comiendo sushi, sin arriesgarse a tener que confinarse por ser contacto estrecho de algún positivo.

"No me tengo que mover de casa ni tengo que arreglarme. Es normal que la comida a domicilio triunfe en tiempo de pandemia”

Y es que la comida para llevar ha llegado para quedarse, al menos, tanto como dure la pandemia y las restricciones que esta conlleva. La oferta de comida a domicilio se ha disparado hasta tal punto que incluso restaurantes de grandes chefs como Santi Taura han optado por estos servicios para no tener que parar su actividad.

Luisa, Raquel, Cayo y un largo etcétera de nuevos clientes del take away han adaptado su ocio y sus quedadas a la pandemia, y en consecuencia, han aumentado la demanda de comida para llevar, permitiendo que locales como el de Manolo, Alexis o Miquel no decaigan.

Suscríbase aquí gratis a nuestro boletín diario. Síganos en Twitter y Facebook. Toda la actualidad de Mallorca en mallorcadiario.com.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios