Escasez de propuestas políticas en materia de turismo

Transcurrida una semana de los principales actos de promoción turística desarrollados en Fitur por las autoridades baleares, las noticias han girado más en torno al balance de lo ocurrido estos últimos años que sobre planteamientos de lo que deba ser una política turística eficaz de cara a las próximas temporadas.

De lo expresado por el Govern en Fitur no cabe esperar grandes novedades. De hecho, no ha habido cambios de calado desde que se derogase la Ley Turística que impulsaba las reformas de hoteles, se doblase la ecotasa para el verano y se transfiriesen las competencias de promoción a los consells. No hay propuestas de futuro, en parte, posiblemente, por el alejamiento del sector que tiene la vicepresidenta y consellera de Turismo, Bel Busquets, quien parece más centrada en su próxima candidatura al Consell de Mallorca como número dos de Guillem Balboa que en su papel de responsable política de la principal industria del país.

En el lado opuesto, este miércoles ha sorprendido la determinación con la que el presidente del PP balear, Biel Company, ha planteado una serie de medidas de política turística para ser adoptadas en los cien primeros días de gobierno, si su partido consigue una mayoría parlamentaria en las próximas elecciones autonómicas. Company afirma que su "primera medida" será recuperar los incentivos para mejorar la planta turística, seguida de la eliminación de la ecotasa en temporada baja.

Hoy por hoy es una incógnita si Company podrá gobernar tras las elecciones de mayo, si podrá aplicar su programa al cien por cien o tendrá que acomodarlo ante un eventual pacto con otras fuerzas. En cualquier caso, es bueno que haya sobre la mesa propuestas concretas que arrojen luz a los problemas de los que se queja el sector. Se trata de luchar contra la pérdida de competitividad y a favor de la creación de riqueza, puestos de trabajo y progreso compartido. El cambio de ciclo y la bajada de reservas anunciada por los empresarios en Fitur debería disparar todas las alarmas y provocar un aluvión de propuestas políticas por parte de todas las formaciones.