El portavoz del Govern, Rafel Bosch, ha indicado este viernes que la deuda de Baleares -alcanzó los 4.432 millones de euros en 2011- "complica" el margen de maniobra que tiene el Ejecutivo autonómico.
Así lo ha admitido el también conseller de Educación, Cultura y Universidades en declaraciones a los periodistas tras informar sobre los acuerdos aprobados en el Consell de Govern y conocer los datos del Banco de España, que sitúan a la comunidad autónoma como la décima más endeudada de todo el Estado.
Después de afirmar que el crecimiento del endeudamiento tiene su origen en la gestión llevada a cabo durante la anterior legislatura, Bosch ha destacado la necesidad de llevar a cabo un estricto control presupuestario para equilibrar estos datos.
"El Ejecutivo autonómico está seguro de que con una política presupuestaria rigurosa podremos devolver todas nuestras deudas", ha señalado el conseller, quien también ha alabado el plan diseñado por el Gobierno central destinado a facilitar el pago a los proveedores por parte de las entidades locales.
No obstante, Bosch ha querido transmitir un mensaje de esperanza y ha asegurado que "saldremos de esta", ha dicho, tras afirmar la necesidad de cumplir con los límites de déficit permitidos y "hacer las cosas de otra manera", en alusión al anterior ejecutivo liderado por el socialista Francesc Antich.