El Consell de Mallorca recibe las llaves de la central térmica de Alcanada

Durante el acto, Cladera ha recibido las llaves de la antigua central por parte del director general de Endesa Baleares, Martí Ribas; y la alcaldesa de Alcúdia, Bárbara Rebassa, ha detallado la institución mallorquina en una nota.

Tras abonar 300.000 euros por ella, el Consell de Mallorca prevé que en 2023 comiencen los trabajos para descontaminar la antigua factoría y también será necesario revisar el subsuelo para quitar los posibles derrames de fuel o metales pesados.

Para afrontar el coste que supondrá esta descontaminación el Consell dispondrá de cerca de 5 millones de euros que provienen de los Fondos de Transición Justa que recibirá la zona de Alcúdia, precisamente para ayudar a desmantelar la central de Es Murterar.

El Consell ha manifestado que desde hace meses se tramita la protección de la central y el antiguo poblado de los trabajadores de Gesa como un Bien de Interés Cultural (BIC).

"Recuperamos la Central de Alcanada. A partir de hoy este lugar es patrimonio de todos los mallorquines y mallorquinas”, ha señalado Cladera, quien ha remarcado que ahora queda definitivamente preservado de cualquier intento de alteración de su fisonomía.

La presidenta también ha explicado que, con esta compra, la institución que dirige da "un paso definitivo hacia la protección de todo este entorno, la descontaminación y la rehabilitación de los restos industriales".

Ahora, el Consell lidera un proceso de recuperación que significará la segunda vida que pondrá en valor que un día, hace 65 años, de la central de Alcanada salían los megavatios que dieron luz a casas y fábricas de Mallorca.

Además, Cladera ha remarcado que recuperar este lugar deja fuera la especulación, preserva una parte del patrimonio industrial más recién y hace posible que las instalaciones tengan un nuevo uso cultural y social.

Por su parte, la presidenta del Govern, Francina Armengol ha destacado la importancia de su recuperación: "Este espacio nos da muchas oportunidades, porque tiene un significado histórico muy fuerte, con un arraigo en la historia de Alcúdia y de la isla".

"Actualizamos el patrimonio industrial a las necesidades del siglo XXI, dirigiéndolo hacia las energías verdes y limpias", ha añadido la presidenta autonómica.