Vasos, pajitas, envoltorios, papeles, vómitos, grasa ... Punta Ballena y calles adyacentes amanecen todos los días de verano convertidos en un gran estercolero. Los turistas salen de fiesta y acaban de madrugada en locales de comida rápida que les sirven la comida y bebida en recipientes para llevar. La gran mayoría acaba en las aceras. Tanto es así, que el Ayuntamiento recoge cada día media tonelada de residuos.
20 operarios municipales de limpieza se centran en este tramo pero es tal la avalancha de basura y descontrol que el ayuntamiento ha puesto en marcha una campaña centrada en los takeaway: establecimientos de hamburguesas, perritos o kebabs que abren 24 horas al día.
El Consistorio recuerda que estos locales son responsables de la limpieza de su área de influencia y concretamente, de la zona comprendida "en una circunferencia de 50 metros de radio alrededor del establecimiento, contado desde sus puertas de acceso".
La Ordenanza municipal para la recogida de residuos municipales y limpieza de espacios públicos, que afecta a éstos y demás locales y terrazas, determina que se perseguirá a aquellos que tiren a la calle la basura y el agua sucia de la limpieza del interior y exterior así como los que no tomen medidas de reducción de generación de residuos.
De momento la campaña es informativa pero próximamente comenzarán a imponerse multas, que pueden ir desde los 300 a los 9.000 euros.
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