
El Hospital Son Espases se ha convertido en el centro de referencia en Baleares de las mujeres con implantes mamarios de la marca PIP, y más concretamente la Unidad de Cirugía Plástica, donde, una vez acreditado que son portadoras de estas prótesis, se llevarán a cabo las pruebas correspondientes y si están rotas serán retiradas.
No obstante, tal y como ha recordado el Ministerio de Sanidad, “la prioridad del Sistema Nacional de Salud (SNS) es la salud y la seguridad de las mujeres que se han sometido a implantes mamarios PIP”, y, por tanto, apoya la extracción “si, una vez hecha la consulta al cirujano, la paciente sigue preocupada y ambos consideran que lo mejor es realizar la intervención”.
En tal caso, se reemplazarán los implantes si la cirugía original fue realizada por el sistema público de salud, de acuerdo a sus protocolos clínicos en mujeres mastectomizadas, dado que “los reimplantes por cirugía estética no están en la cartera de servicios del SNS”.
Paralelamente, la Federación Nacionalde Clínicas Privadas (FNCP) ha insistido en que aquellos centros que trabajaban con las prótesis mamarias de Poly Implant Prothese (PIP) están atendiendo a todas sus pacientes y, en función del estado de los implantes y el historial médico, están procediendo a su retirada “en caso de resultar necesario”, una decisión que, en última instancia ha de ser tomada por la paciente y el médico.
De todas formas, la organización de consumidores FACUA ha dejado claro que las clínicas donde se operaron deben asumir los costes de su retirada y la colocación de nuevas prótesis. La existencia de irregularidades en su fabricación implica la responsabilidad frente a las consumidoras por parte de las empresas que se las vendieron y colocaron.
DETENCIÓN DEL PROPIETARIO DE PIP
Y mientras el miedo de numerosas mujeres crece no sólo en Baleares sino en todo el mundo la Policía francesa ha detenido al propietario de la empresa Poly Implant Prothese (PIP), Jean-Claude Mas Florent, creador de los implantes de silicona defectuosos vendidos en varios países del mundo, motivo por el que la agencia policial internacional (Interpol) emitió una “alerta roja”, según han informado fuentes policiales.
Junto a Mas Florent ha sido detenido otro ejecutivo de la empresa.
PIP fue fundada en 1991 y en 2010 cerró a raíz de que sus implantes fueran retirados del mercado. De hecho, el Gobierno francés ha recomendado que aquellas mujeres que lleven estas prótesis mamarias acudan a sus cirujanos y se los retiren como medida de precaución.
Más del 90 por ciento de las prótesis mamarias fueron vendidas a países latinoamericanos y europeos. PIP llegó a ser la tercera mayor empresa productora del sector y ha vendido alrededor de 300.000 implantes mamarios a más de 60 países.
Las irregularidades detectadas en dichos implantes residen en su composición anómala, si bien las autoridades francesas y expertos sanitarios han reiterado que no existen aparentes riesgos de que aumente las probabilidades de contraer cáncer. No obstante, se han manifestado inusuales altos índices de desgarros y reventones.
La figura de Mas Florent está rodeada de misterio. Fue interrogado porla Policía en noviembre 2010, pero fue liberado sin cargos. Asimismo, la fábrica donde operaba PIP, situada en el extrarradio de la ciudad de Toulon, en el sur de Francia, continúa siendo propiedad de su socio principal.